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Arquitecto: Ruiz Larrea y Asociados
- Área: 11187 m²
- Año: 2013
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio es el resultado de un PROCESO que, atendiendo tanto a criterios energéticos como espaciales, permite llegar a un resultado arquitectónico libre de cualquier apriorismo formal. En este sentido, los criterios fundamentales que han alimentado el proceso son los siguientes: 1.Agotar la edificabilidad, de tal modo que la geometría origen del proyecto pueda entenderse como un sólido capaz máximo, cuyos vacíos y sustracciones responden a requisitos funcionales y energéticos. 2.Diseñar con especial cuidado los espacios interiores del edificio, atendiendo al confort lumínico, térmico y acústico de sus ocupantes. 3.Reinterpretar las formas de la arquitectura tradicional andalusí, entendiéndolas como sistemas pasivos de acreditada eficacia, complementadas con sistemas activos de bajo consumo. 4.Obtener un funcionamiento energético con reducidas demandas, utilizando, además, las infraestructuras existentes (red fluvial de disipación de calor), y que sea reversible en su uso a lo largo del año: teniendo en cuenta las condiciones extremas del verano, pero estudiando con detalle su comportamiento en invierno y los demás periodos de entretiempo. 5.Diseñar un sistema de envolvente industrializable y activa energéticamente: una piel bio-perfectible que será desarrollada para el propio edificio, que será su principal ejemplo de aplicación.
La matriz traduce geométricamente las solicitaciones energéticas del entorno, originando una malla que permita moldear espacialmente el edificio. Dichas solicitaciones son las siguientes 1.Geometría de la parcela. 2.Óptima eficacia estructural. 3. Adecuada orientación del edificio en relación al soleamiento. 4.Adecuada orientación del edificio en relación a los vientos dominantes. La configuración de la matriz, por tanto, puede entenderse como la superposición de tres capas: Malla urbana y estructural, dirección de captación de vientos frescos y la mejor orientación solar. Aplicada sobre el volumen máximo capaz del edificio -un paralelepípedo con coeficiente de forma óptimo- dicha malla origina una MATRIZ ENERGÉTICA ESPACIAL, capaz de resolver en su entramado tanto la piel del edificio como sus espacios interiores. La piel. La envoltura del edificio, sistema regulador y controlador del ambiente interior, está constituida por una piel de dos capas con una cámara de aire. Esta piel está compuesta como una sucesión de varias capas, con una cámara interior ventilada que permite disipar el calor transmitido desde el exterior en verano y que actúa como colchón térmico durante los meses de invierno. Esta piel se autorregula mediante la cámara de aire que permanece cerrada o abierta según las condiciones climáticas exteriores.
El lucernario -denominado mocárabe, siguiendo los invariantes de la tradición andalusí- es un elemento arquitectónico diseñado para permitir tanto la entrada de luz natural cenital al edificio de una manera óptima dependiendo del ciclo estacional como la evacuación del aire viciado proveniente del interior del edificio. El diseño del lucernario mocárabe ha sido el resultado de estudiar los siguientes parámetros: captación de luz durante el invierno (orientación Sur e inclinación adecuada), protección de la radiación durante el verano y captación de luz difusa (el mocárabe como elemento de reflexión),orientación S-SE para evitar la captación de radiación de poniente y el sobrecalentamiento, usos de materiales reflectantes (enfoscados blancos, aluminio), unidos a otros de elevada inercia, y utilización de la cámara interior del lucernario como colchón térmico.
Los 'pozos de luz' son un sistema de iluminación que están formados por conductos capaces de transmitir eficientemente la luz natural desde un foco superior hasta una serie de ámbitos inferiores. Frente a otros sistemas análogos conocidos y ya disponibles en el mercado (agrupados bajo el término genérico de solar tubes), los 'pozos de luz' coliman el haz luminoso de modo eficaz y lo entregan manteniendo unos niveles de iluminación adecuados, no sólo verticalmente sino también de manera horizontal. El conducto vertical por cuya superficie se van transmitiendo la luz no es, como en los sistemas convencionales, opaco, sino completamente translúcido, lo que permite ayuntar las indudables ventajas del sistema en cuanto a ahorro energético con nuevas prestaciones estéticas. Los 'pozos de luz' pueden convertirse así en elementos adecuados para generar atmósferas lumínicas en el interior de los edificios, ocupando mucho menos espacio del requerido por los tradicionales patios de luces y permitiendo, frente a estos, un control riguroso de los niveles de iluminación.
La fachada Biopix es un sistema perfectible que permite configurar a la carta cualquier tipo de envolvente constructiva, integrando tanto los elementos de revestimiento tradicionales como otros sistemas más sofisticados como paneles fotovoltaicos o termosolares, pantallas led, etc. La configuración de la envolvente responde a las condiciones específicas propias de cada solar y a las necesidades funcionales o disponibilidad económica de cada Propiedad. El sistema permite una configuración flexible y adaptable, configurada para un mantenimiento. Como un organismo vivo, la piel se adapta dependiendo de su localización física.