Todo cambia según el punto de vista con que se mire, suelen decir. Olvidan decir también que todo cambia con la escala a la que como ser humano estás obligado a observar. El universo visto desde algún punto exterior podría entenderse como un organismo vivo. Un hormiguero desde dentro, una metrópoli fantástica.
Educar un ojo observador con el que abstraerse de las reglas visuales establecidas genera mundos enteros ante nosotros, ocultos tras el velo de la costumbre y la pereza del mirar, buscando interpretar y expresar nuestro entorno de manera distinta.
Hoy en Arte y Arquitectura os traemos las ensoñaciones de Jared Lim, atrapadas con su cámara de loco enamorado de los patterns, fruto de la descontextualización, de la confusión de la escala, y de su personal punto de vista de la arquitectura de las grandes ciudades.
Más después del salto…
“Siempre me ha gustado la geometría; líneas, curvas, patrones y diseños abstractos. La Arquitectura me parece una buena manera de expresarlos”.
Asentado en Singapur, fotógrafo de afición y asiduo visitante de jóvenes y seductoras urbes por motivos de trabajo, Lim se confiesta un obsesionado de la búsqueda de juegos geométricos repetibles.
“Me apasiona viajar y la fotografía no sólo me permite documentar mi viaje, sino expresarme artísticamente. Me ha encantado la geometría desde que era un niño. Incluso cuando yo era joven, en la escuela, me encantaba crear patrones y diseños repetidos”.
Sus cuidadas composiciones generan mosaicos, fractales, juegos de líneas, de sombras, de color, que despistan al observador despojado del factor escala que da la presencia humana; al observador desprovisto de la información que da la completa observación de un objeto, de un edificio, de un micromundo.
“Para mí, la toma de fotografías es algo instintivo. Las fachadas de los edificios dan caracteres distintivos, como seres vivos. Prefiero extraer diseños de un edificio que cuente una historia en lugar de fotografiar todo el edificio“
El resultado es brillante y vivo. El objetivo es una imagen, y nada más, es la persecución de capturar elementos, de manipular la aparente profundidad de las obras arquitectónicas, de atrapar a un espectador situado en el exterior que intenta desesperadamente mirar hacia adentro. La fotografía es su afición, es una excusa para presentar su propio punto de vista. Como Lim dice… vamos a experimentar y jugar.