Como les contamos anteriormente , la Sociedad Pública de Medio Ambiente de Castilla y León ha seleccionado los dos proyectos ganadores de la segunda fase del concurso de las Cúpulas del Duero en Valladolid, España.
El equipo de Herreros + Mangado obtuvo el premio ganador para la Cúpula de la Tecnología, la cual les mostramos a continuación.
La Cúpula de la Tecnología se sitúa en un territorio a las afueras de Zamora fuertemente manipulado con huellas de actividades agrícolas, industriales y de servicios, recorrido por infraestructuras de importancia y atravesado por canales de riego y el cauce estacionario del Valderaduey, afluente del Duero. Nuestro proyecto quiere asumir la responsabilidad de interpretar la riqueza y las potencialidades de un lugar que a simple vista podría pasar desapercibido pero que acumula una riqueza de referencias y elementos que no han encontrado aun su papel en el paisaje. A la vista de las actuaciones previstas en el área, la Cúpula será la cabeza visible de un gran parque empresarial que agrupará usos relativos a la agricultura y la industria más avanzadas.
Los criterios paisajísticos planteados proponen recuperar algunas tradiciones agrícolas locales e implantarlas mediante criterios compositivos, revelando junto a sus cualidades antropológicas, patrimoniales y productivas, una componente estética. Una geometría sencilla incorporará algunos cultivos autóctonos salpicados de claros para actividades de ocio y deportivas, aparcamientos, etc. que hará de su diálogo con las acequias de riego y el paisaje cambiante generado por las crecidas del Valderaduey, el soporte que debe recibir las edificaciones al ritmo adecuado para adaptarse a las disponibilidades económicas y las necesidades cambiantes.
Los criterios de diseño de las edificaciones apuntan a la industrialización de unidades tan grandes y completas como sea posible. Éstas se basan en la fabricación en taller de los planos, crujías o fragmentos de fachada para ser ensamblados en obra o en un sistema de montaje de grandes unidades tridimensionales completamente equipadas Todos los procesos constructivos se realizarán en seco excepto las losas de los forjados colaborantes. La disposición de las unidades busca la protección de un entorno confuso creando un patio controlado que funciona como espacio de bienvenida pero también busca una significación en el paisaje tomando una de sus piezas una altura significativa para ser visible desde la autovía y el tren.
La organización de la Cúpula es de gran simplicidad y se basa en cuatro gestos de diseño: establecer los puntos fijos y las circulaciones a lo largo de la fachada exterior; activar un sistema de subdivisiones que acepta elementos opacos, translúcidos, transparentes y acústicos con el mismo principio constructivo; utilizar en la medida de lo posible materiales reciclados, reciclables o procedentes de procesos de fabricación sin emisiones; promulgar estrategias de ahorro de energía tanto en la construcción como durante la vida útil del edificio; entender que la construcción industrializada puede formar un conjunto unitario con el paisaje de manera que las sucesivas fases puedan entenderse como una evolución simbiótica de los elementos geográficos, naturales y técnicos. En este sentido, el montaje en taller permite minimizar las acciones en el sitio por lo que las ampliaciones son compatibles con el uso de los edificios y su implantación puede ser un espectáculo modélico por reducir al mínimo las agresiones al entorno y la huella ecológica habitual de la acción constructiva.