Oliver Schau es un artista alemán que ha realizado estas intervenciones de mobiliario urbano reciclando distintos espacios públicos en la ciudad de Hamburgo. Consiste en tomar como base distintas estructuras propias de la ciudad y re-adaptarlas para el uso de sus habitantes. Para ello utiliza tubos de drenaje amarillos que tienen la firmeza y a la vez flexibilidad necesarias para adecuarse a las estructuras que lo soportarán.
De bajo costo y resistentes a las variaciones climáticas, como el calor y la lluvia, son cómodos y permiten al usuario urbano un recreo de color y relajo en distintas posiciones; acostado sobre la base de un puente, recostado o sentado entre un árbol y algún poste.
“El enfoque experimental e intervencionista para mí es más importante que la búsqueda del producto perfecto” cuenta a Schau a Spiegel.
Este mobiliario urbano demuestra el empoderamiento sobre la ciudad que puede tener un simple tubo de drenaje, cómo un diseño simple y honesto puede reconvertir los espacios, y cómo esta misma iniciativa quizá pueda repetirse en otros sectores más carentes de recursos y espacios públicos.