- Área: 2500 m²
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Fotografías:Francesc Rubí
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En el proyecto de "Camí dels Corrals" de Manresa se planifica la urbanización de un camino situado en la vertiente sur del Puigcardener, una pequeña colina donde se inició la historia de la ciudad y el lugar donde pervive el casco antiguo, en la parte más meridional de la ciudad. El ámbito de la zona a urbanizar se encuentra a medio nivel entre el río y la cima de la colina, donde se eleva uno de los monumentos más importantes de Manresa, la "Basílica de Santa Maria de la Seu".
El proyecto pretendía recuperar el trazado del antiguo camino "El Camí dels Corrals". Se trata de la primera actuación de urbanización de esta degradada zona de la ciudad, con la que se pretende llevar a cabo una conversión progresiva de la ladera sur del Puigcardener en una gran zona verde.
La ejecución del proyecto permite establecer un recorrido peatonal, prácticamente horizontal, que conecta la vertiente oeste de la colina donde actualmente se construye la nueva plaza "Reforma" y un aparcamiento subterráneo, con el punto de inicio del camino hacia la "Cova de Sant Ignasi de Loyola" (Santuario Jesuita del siglo XVI) en la vertiente este.
El proyecto, que trabaja con una superficie de 2508 m2, prevé la urbanización del camino y la consolidación de la base de las cuevas rocosas de la colina que recorren el camino. La ordenación general de la propuesta de urbanización dibuja un trazado muy natural, nada forzado, que se adapta a la orografía y que intenta mantener parte de la vegetación autóctona existente.
El nuevo trazado queda limitado y protegido del desnivel hasta el río por el muro de piedra reconstruido con un coronamiento de hormigón que se transforma en banco, a lo largo de todo el recorrido. A lo largo del circuito se combinan las zonas duras con las zonas blandas. En un recorrido de este a oeste, se empieza con un pavimento de hormigón natural cuando enlaza con el de piedra, existente en la calleja de bajada de la basílica de Santa María de la Seu.
El siguiente tramo se trata con hormigón oxidado hasta enlazar con la entrada de la plaza de la Reforma, al oeste. En la parte media de este recorrido, se sitúa otra zona blanda de descanso, con césped natural y arbolado, sobre unos lisos avanzados de la colina, sobre el río. El proyecto también incluye la ubicación de balizas de iluminación bajas que dibujan el recorrido de todo el camino y de bancos de hormigón natural en las zonas blandas de descanso.