Como parte de la agenda cultural de LIGA, Espacio para arquitectura en la Ciudad de México, a finales de junio se inauguró la muestra "Arquitectura para dioses". Se trata de un registro contemporáneo del edificio del Heroico Colegio Militar, diseñado por Agustín Hernández Navarro y Manuel González Rul en 1976, una pieza emblemática de la arquitectura mexicana de su época.
El día de hoy, 10 de noviembre del año en curso, la Academia Nacional de Arquitectura a través de un comunicado emitido por el Arq. José F. Reygadas Valdéz (Presidente) y Arq. Antonio Gallardo E. (Secretario General) se dio a conocer el sensible fallecimiento del arquitecto mexicano Agustin Hernández Navarro, Académico Emérito de dicha institución.
Como parte de la agenda cultural de la semana del arte que tuvo lugar en la Ciudad de México, PEANA presenta la muestra "Por debajo del árbol" en el Taller de Arquitectura de Agustín Hernández, mismo que abre sus puertas por primera vez al público para reunir obra contemporánea de quince artistas en diálogo con el universo de Agustín Hernández. La exhibición es curada por Ana Pérez Escoto y Carlota Pérez-Jofre y permanecerá abierta del 10 de Febrero al 4 de Marzo.
Las instalaciones del Heroico Colegio Militar son sin duda alguna, unas de las edificaciones más singulares y de carácter más particular en México. Diseñado por el arquitecto Agustín Hernández Navarro en colaboración con Manuel González Rul en 1976, este conjunto arquitectónico militar se ubica a las afueras de la Ciudad de México buscando responder a las necesidades que urgían a la Institución que alberga.
En nuestro primer especial de Aniversario, presentamos 3 Clásicos magnánimos de la Arquitectura Mexicana, los más leídos de nuestra historia. Son obras ubicadas en la Ciudad de México que han llenado de inspiración a generaciones completas de arquitectos tanto de México como del mundo. Un ganador del Pritzker y el Arquitecto conocido por su Arquitectura Escultórica protagonizan este especial, que nos recuerda que la Arquitectura Mexicana siempre ha tenido la intención de vincular los avances tecnológicos y estilos arquitectónicos de aquella época con la identidad y tradición nacional.
Se han dado a conocer a los ganadores de la Segunda Bienal de Arquitectura de la Ciudad de México, organizada por el Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, en la que participaron obras construidas, trabajos de investigaciones y publicaciones terminadas durante el bienio 2013-2015.
Revisa en detalle algunos de los proyectos ganadores a continuación.
Abierta al público desde el día de ayer, la exposición Latin America in Construction en el MoMA se ha convertido en la ventana a la arquitectura moderna latinoamericana más importante en la historia; se trata de un complejo compendio de posiciones, debates y creatividad arquitectónica que abarca, desde México hasta Cuba y el Cono Sur, entre 1955 y principios de la década de los 80s.
Hoy, con información brindada por el museo, les entregamos el listado en orden cronológico de las obras modernas mexicanas que protagonizan la exhibición, desde O´Gorman en 1930 hasta Legorreta en 1981. La guía de los clásicos de arquitectura mexicana, a continuación.
Esta extraña y sofisticada obra de arquitectura, como una monumental y provocativa escultura ultra-moderna, es en realidad una vivienda familiar de diseño vanguardista del arquitecto mexicano Agustín Hernández, conocido por su estilo de Arquitectura Escultórica.
La colonia Bosques de las Lomas es un área residencial ubicada al noroeste de la Ciudad de México. El taller y hogar de Agustín Hernández, diseñado por él mismo el año 1975, surgió en una zona boscosa del lugar escondido entre los árboles. Como si flotara sobre este barranco de 40 metros de altura, aparece esta inusual y monumental composición, que juega con la geometría y la gravedad, conformándose como una de las obras más importantes de este renombrado arquitecto mexicano; el lugar y la escultura donde el arquitecto vive, trabaja, observa y descansa.
“Este taller llena todo lo que he buscado en la arquitectura, que estructura, forma y función sean una unidad. Es algo que nos enseña la naturaleza. Ya desde cuando estamos diseñando una estructura, esa estructura nos va a dar espacios, espacios diferentes, espacios que hablan, otros cantan, otros nos invitan a la acción, otros nos invitan al reposo… En fin, el espacio se apodera de nosotros, nosotros de él; si estamos en un cuarto cúbico, somos cubo, si estamos en un espacio esférico, nos sentimos esfera… esa simbiosis que existe entre el espacio y el hombre” (Agustín Hernández).