La gráfica, aún antes que el lenguaje y la escritura, fue el primer medio de comunicación y de significación de la humanidad. Dibujar es sustituir la realidad a partir de la representación, es decir, sustitución de objetos por imágenes codificadas en cada uno de los sistemas gráficos de representación.
En arquitectura, la gráfica incentiva la imaginación y es la base del pensamiento proyectual ya que no sólo constituye nuestro código de comunicación, sino que configura nuestra capacidad de expresarnos en términos disciplinares. Primero el dibujo se construye en la mente del arquitecto o arquitecta para luego volcarse al soporte determinado a partir de cualquier tipo de instrumento.