Con motivo del Seminario 'Regeneración Urbana' realizado en Santiago por INSTUDIO en la Universidad Finis Terrae tuvimos la oportunidad de conversar con Benedetta Tagliabue. La destacada arquitecta italiana es conocida por sus propuestas altamente sensibles a su contexto y, al mismo tiempo, sumamente experimental en su acercamiento a las formas y materiales. A principios de 1990, junto a Enric Miralles fundaron el estudio Miralles Tagliabue EMBT, convirtiéndose hoy en una de las prácticas españolas más respetadas del siglo 21. Algunas de sus obras más notables incluyen la renovación del Mercado de Santa Caterina en Barcelona y el enorme Edificio del Parlamento Escocés, obra que el crítico Charles Jencks describió como "una especie de pequeña ciudad" que refleja la complejidad propia de las calles de Edimburgo.
Benedetta nos habla de su más reciente proyecto, una estación de metro en la línea 'Grand Paris' en el banlieu parisino. Una obra que se presenta con motivo de invadir el espacio público, generar colaboración e intercambio con la gente a través de un espacio cultural que absorbe el movimiento y lleva el arte a ser parte de la vida. No ve el diseño como un objeto, sino que más bien como el resultado de una serie de relaciones. Así es como nos describe el papel del arquitecto: dibujar para descubrir las líneas secretas que harán funcionar la ciudad.