El ser humano pasa la mayor parte de su vida dentro de un edificio, ya sea para vivir, trabajar o jugar. El COVID-19 acentuó aún más este problema durante el período de aislamiento, mostrando la necesidad de pensar en proyectos de construcción más saludables y confortables.
Este artículo presenta algunos consejos para pensar proyectos más saludables, enfatizando la importancia de tener un pensamiento sistémico que considere diferentes disciplinas, como la arquitectura, la ingeniería, la ciencia de los materiales, la mecánica, la fisiología, la psicología, entre otras.