por Álvaro Pineda Ancieta, arquitecto PUC, desde New York,.
Esta semana estuve en el Museo Guggenhaim de Frank Lloyd Wright en New York, en la 1071 Fifth Av con 89th Street. El edificio está en una larga etapa de restauración y recuperación de la fachada producto de las grietas y fisuras que ha ido acumulando con el tiempo.
Un grupo de especialistas – ingenieros, arquitectos y conservadores – han ido realizando muestras de hormigón y haciendo mediciones de dilatación de las enfierraduras armadas del edificio entre las temporadas de Invierno y Verano en esta ciudad, que pueden oscilar entre los -15º y 35º respectivamente.
Por causa de este fenómeno normal de dilatación y contracción de las estructuras armadas, las pieles de hormigón más externas del edificio han comenzado a trizarse, agrietarse y descascararse de manera acumulativa desde su inauguración en 1959. Dentro del mismo museo, en uno de los pasillos sinuosos de circulación, se exhibe el método de los especialistas para realizar el estudio previo a la reconstitución y reparación de los daños.
Valiosa encontré la manera gráfica para mostrar con lineas rojas, azules y amarillas las zonas donde se concentran la mayor parte de las grietas, que han ido descascarando principalmente por fuera al edificio, el que ha perdido por el momento su principal cara moderna hacia Central Park.
La exhibición, abierta a todo el público que visita el museo, también muestra la tecnología utilizada y los instrumentos técnicos de medición de vibraciones, dilataciones y corroción de estructuras armadas. La Fundación y sus Representantes encargados del estudio y reparación del Guggenheim prometen tener todo resuelto para fines del 2007, en el marco de la celebración de los 50 años de su existencia.
créditos fotografías: Álvaro Pineda
